Shinonome Yuuko wa Tanpen Shousetsu o Aishite Iru Vol. 02 - Capitulo 8
¡Nuevo capítulo!
La verdad es que estoy muy sorprendido, mejor dicho consternado, de la velocidad con la que he traducido esto, ¿pero pueden culparme?, de verdad quería saber en que seguía la historia, tantas dudas que quedaban en el capítulo anterior con respecto al DVD que le entregó Shinonome a Eita así como el rechazo a los sentimientos de Kitagawa y la reconciliación de Arumi-san con Keisuke...
Un capitulo más y terminaré de traducir el volumen completo y luego procedemos al vol. 19 de Oda Nobuna.
Gracias por su apoyo y comentarios alentadores...
Capítulo 8
Me decidí a encontrarme con él y decirle todo.
Estaba determinada a trasmitirle mis sentimientos y luego dejarlo.
No merezco que él me ame.
Sin embargo, tuve la premonición que si no le transmitía mis sentimientos no sería capaz de ir a ninguna parte en el futuro.
Eso se debe, a que de verdad lo amo.
Y no hay otra manera de acabar con este amor sino es sacando estos sentimientos que fluyen dentro de mi. Estos pensamientos ruines, turbios y de alguna forma viscosos se han coagulado dentro de mi corazón, y ahora son tan pesados para mi que ya no puedo ir a ninguna parte.
Nishizono Yuuko.
"Es difícil amar"
Al final si siquiera pude empezar a leer el guión escénico de Shinonome debido a que Arumi-san me llamó para la cena, después de todo, no puedo ignorar la primera cena desde que ella regresó, por lo tanto, fui a cenar primero y luego me fui a mi habitación.
Cuando le di vuelta al derecho a las hojas en el escritorio pude apreciar la escritura plasmada en ellas por primera vez, me llenó un indescriptible sentimiento de melancolía así como de felicidad.
"Guión para la obra «Es difícil amar» por Shinonome Yuuko"
Se trata solo de una cadena de texto que dice eso, sin embargo, el solo pensar que esto fue escrito por Shinonome, hace que lo vea como algo muy valioso. Incluso cuando tengo claro que solo se trata de letras estampadas por la tinta de la impresora, de alguna forma parecen especiales y únicas.
Le di vuelta a la página y comencé con la lectura.
La historia comienza con el monólogo de un hombre.
El hombre esta enamorado de una mujer. Sin embargo, él no puede decirle a la mujer que es lo que siente por ella y se resigna a solo verla en la distancia. Mientras observaba en silencio a la mujer, varios hombres aparecieron alrededor de ella tratando de ganarse su afecto.
La mujer daba la impresión que no se sentía muy a gusto por eso.
Al hombre tampoco le gustaba verlo. Quiero que solo me veas a mi. Deseaba decirle eso desde lo profundo de su corazón, no obstante, él no podía decirle a la mujer como se sentía. Él hombre no puede hablar. Esa es la razón por la cual no puede transmitir nada con palabras. Y aunque quisiera redactar una carta él no sabe como escribir, por lo tanto, es incapaz de transmitirle sus sentimientos a la mujer mientras el tiempo pasa en vano.
La voz en su mente se convirtió en un monólogo transmitiendo los sentimientos del hombre a la audiencia. No obstante, sus sentimientos nunca alcanzaron a la mujer. El hombre ocasionalmente observaba a la mujer desde un costado. Él era un hombre lamentable y patético que solo podía hacer eso.
Eventualmente, los hombres que rodeaban a la mujer comenzaron a decir lo que pensaban y a discutir quién la amaba más. Ahí se encontraba ese hombre que no podía hablar y que no se podía unir a la conversación. Por lo tanto, los otros hombres ignoraron al mudo y continuaron diciéndole a la mujer quién era el que la amaba más.
Sin embargo, la mujer le preguntó al hombre que no podía hablar.
¿Tú también me amas?
El hombre con ausencia de palabras no le respondió a la pregunta sino que simplemente le entregó una flor a la mujer.
Esa flor era la que a la mujer más le gustaba. Se trataba de una flor preciosa que solo florece en acantilados inaccesibles, donde dar un paso en falso puede significar la muerte.
Al contemplar la flor, la mujer dijo que esa acción era mucho más hermosa que diez mil palabras.
Y entonces intentó aceptar al hombre que no podía hablar...
Mientras iba leyendo ya por el final, el teléfono móvil sobre mi escritorio comenzó a sonar. Inmediatamente me puse de pie y lo cogí.
─... Aló.
La persona al otro lado de la línea... la voz de Kitagawa sonaba un tanto triste,
─Ah, ¿no te interrumpo...?
Me preguntó.
─Para nada.
─El asunto es, que acabo de terminar de leer el guión de Shinonome-san...
Justo cuando Kitagawa estaba diciendo eso yo,
─Yo también lo acabo de leer.
Le dije eso.
Tras un momento de silencio, Kitagawa dijo con un pequeño suspiro.
─Ya veo... también te dio una copia a ti Minami.
─Si.
─No sé como ponerlo en palabras... pero pienso que debería ofrecerte una disculpa...
─... ¿Una disculpa?
─¿No te lo dije antes? Que me preguntaba si a Shinonome-san de verdad le gustaba Minami. Pensé que a mi me gustabas más de lo que ella a ti.
─.... Ah.
─Lo siento... Pienso que lo que dije fue grosero. No importa como lo vea a Shinonome-san le gustas mucho, eso es lo que creo. Si no fuera así, no creo... que se haya dignado a escribir el guión.
No pude responder nada a las palabras que me dijo Kitagawa.
El hombre mudo que aparece en la narración. Esa podría ser la verdadera naturaleza de Shinonome, eso es lo que sentí. Un hombre que ama a una mujer pero no le puede decir nada. Un sujeto que no puede hacer nada más que sentirse frustrado cuando ve que otros hombres se arremolinan alrededor de la mujer.
─Nunca pasó por mi mente que saldría con algo como esto... Para ser honesta, siento que dio justo en el clavo...
─Te entiendo.
También concordaba con ella.
Me sentía de la misma manera. Este texto puede parecer un guión en forma, pero en realidad se parece más a una novela. Hay muy pocos movimientos, la mayoría de los sentimientos del hombre... se reflejan en sus monólogos. Y el contenido de sus pensamientos junto con el final de la historia también tuvieron un gran impacto en mi.
─Pero sabes... yo no estaba pensando en robarte del lado de Shinonome-san, ¿me entiendes? Sin embargo, solo se dio que me enamore de ti, y por eso... quería volverme más cercana contigo, eso es todo... no habían segundas intenciones...
─No te preocupes.
Tuve que decirle eso a Kitagawa ya que ella se ahogaba en sus propias palabras. Y entonces continué.
─No creo que sea tu culpa o ni nada como eso. Al final, yo soy el que tiene la culpa. Dejando a un lado si le gusto a Shinonome, a decir verdad yo no lo sentía en aquel momento e incluso si eso me preocupaba no busqué hablarlo... solo me puse a hacer un berrinche. Ella quería que yo hiciera algo. Pero yo no hice nada.
Cuando terminé de decir eso, pude notar que Kitagawa quería decir algo, sin embargo, no la dejé y continué.
─Por lo tanto... supongo que es inevitable que Shinonome me odie por eso. Me odio a mi mismo por ser así, tú me entiendes, así de patético. No obstante... lo que acabamos de leer en el guión, no son los verdaderos pensamientos de Shinonome.
Bajé la mirada para leer la última página del escrito.
Cuando la mujer intentó aceptar al hombre mudo, él la dejó. Sin decir una sola palabra. No pudo decirle nada.
Y el hombre que no podía hablar expresó sus verdaderos sentimientos a través de su monólogo.
Le dijo lo que sentía por ella al subir aquellos precipicios mortales para obtener aquella única flor. Pero, él pensaba que no se merecía su amor.
Debido a que también llegó a sentir odio por ella. Al ver como ella recibía el afecto y la atención de los otros hombres mientras les sonreía, eso hizo que la odiara.
Incluso si se trataba de un odio por lo tanto que la amaba, él se sentía profundamente avergonzado de haber reaccionado así. Esa es la razón por la que le dijo lo que sentía por ella, y fue así también como le puso un punto y final a su amor por ella...
No hubo un final feliz.
─Tienes razón...
Las palabras de disculpa de Kitagawa probablemente se deben al desenlace que leyó en este guión.
Si el hombre mudo representa a Shinonome entonces la mujer que es admirada por varios hombres soy yo.
Y la narración termina cuando los dos se separan.
─Esta es mi culpa... hablo en serio. Me sentía tan bien contigo que ya no le presté atención a Shinonome. Sin embargo, me gusta Shinonome y no tengo intenciones de romper con ella.
Incluso si esta historia refleja la determinación de Shinonome.
─Si...
─Por esa razón es que ya no puedo salir a solas contigo Kitagawa.
─Comprendo. Lo entiendo, pero, y si...
Entendía perfectamente hacía adonde iban esas palabras. Pero no dije nada.
No quería ni siquiera pensarlo. No puedo concebir separarme de Shinonome. No sé lo que tiene en mente Shinonome o que clase de sentimientos alberga. Yo quiero estar con ella. Eso es en todo lo que puedo pensar en estos momentos.
─Lo siento, tengo que colgar. Tengo muchas cosas que hacer.
─Claro, entiendo... lamento haber llamado tan de la nada.
─Esta bien. No hay problema. Y por cierto, ¿vas a usar... este guión?
Yo... no creo que Kitagawa quiera... utilizar un guión que muestra en cierta manera lo que nos ha sucedido últimamente.
Sin embargo, Kitagawa tras reírse un poco a secas dijo.
─Lo usaré. ¿Por qué dices eso?
─Pero...
─¿Tienes idea de que tan miserable me sentiría si no lo utilizo? He herido a otros por mi propio egoísmo y esto podría causar que rompan, sin embargo, ese chico no se quedará a mi lado. Y además, ¿de verdad crees que rechazaría este guión solo porque es frustrante?
─... No vamos a romper, tonta.
A mi inmediata respuesta Kitagawa se rio otra vez.
─Ah... si, si. Entiendo. Lo que tú digas. Voy a colgar en estos momentos porque me sentiría terrible si te enamoras de mi. Ahora ve a disculparte con Shinonome-san.
─Si... te lo agradezco.
─Y todavía me lo agradeces, eh.
Y así me despedí de ella y luego colgué la llamada.
Dejé salir un suspiro.
Arrojé el celular sobre la cama y me cambié el uniforme que había estado utilizando todo el rato por unas prendas casuales. Después de eso volví a recoger el teléfono y salí del cuarto.
Bajé por las escaleras y me dirigí a Arumi-san que estaba descansando en la mesa.
─¡Voy a salir un rato!
Cuando le dije eso, me sorprendió escuchar el sonido de las pantuflas que se me acercaban.
Yo ya me encontraba por la puerta poniéndome lo zapatos cuando,
─¿Qué pasó Eita? ¿Algo ocurrió?
Me dijeron esas palabras.
─Tengo que ir a hacer algo.
─¿Algo que hacer? ¿A estas horas?
─Es algo muy importante. Puede que regrese tarde.
Creo que ella entendió algo entre líneas de lo que le dije ya que usualmente ella me presiona para que le cuente todo, sin embargo, solo hoy no lo hizo.
─Ok... entiendo. Ya es tarde así que ten cuidado.
Me despidió sin ponerme trabas.
Me puse de pie y volteé a ver a Arumi-san sonriendo.
─Gracias... ya me voy.
─Si, que te vaya bien.
Y así salí de la casa.
La fría brisa nocturna se sentía extrañamente cómoda.
*
El escenario desconocido de la ciudad me hizo sentir de cierta manera intranquilo.
Detrás de mi la estación se veía más pequeña de lo que esperaba, parecía de alguna manera solitaria, ya que no habían tantas personas.
Me senté en una pequeña banca que encontré a poca distancia de la estación, saqué mi celular y al encontrar el número de Shinonome presione el botón de [llamar].
Varias veces sonó el tono de llamada hasta que se detuvo.
A través del teléfono pude escuchar una débil respiración.
─... Shinonome.
Sin embargo, ella no me contestó.
─Leí el guión.
Aunque todavía no recibía ni una sola respuesta, no me importó y seguí hablando.
─Me preguntó que fue... Esta extraña sensación. Me sentí furioso a la vez que sentí que alguien estaba llorando enfrente de mi. Quizás eso es ser pretencioso pero también me hizo feliz.
Estoy seguro que quiero decirle más, sin embargo, de mi boca no salen las palabras correctas. Tuve que mover mi boca lentamente, poco a poco, mientras me concentraba.
─Yo... no sé como decir esto, no tengo confianza en mi mismo en varios aspectos. Siempre he sido así. Siempre he sentido que mi hermano mayor es mejor en cada aspecto y debido a eso tengo un complejo de inferioridad... Pensaba que no importara que tanto lo intentara, jamás sería tan bueno como mi hermano. Pero hoy, por primera vez en mi vida, siento que ese puede no ser el caso. Me he dado cuenta que mi hermano mayor solo es una persona ordinaria. Quizás solo por mi propia conveniencia me he rendido en hacer varias cosas. Esa es la razón por la que en algún lugar en lo profundo de mi corazón, me rendí contigo.
Escuché un leve sonido de ahogo en la respiración de Shinonome.
─Siempre me dije a mi mismo que no sabía en lo que estabas pensando. Incluso me llegué a preguntar si te importaba. Era más fácil para mi creer que era así. Era más fácil hacerme la victima que tener que ir a preguntártelo. Así es como he estado viviendo mi vida. No hago nada por mi cuenta. No espero nada de nadie. Pero...
Tenía un poco de temor de decir algo más que esto.
Pero no tengo otra opción que decirlo.
Ahora que he llegado tan lejos, no puedo solo irme sin decirlo.
Con eso en mente, tragué saliva. Y abrí mis labios. Se escuchó el débil sonido de labios resecos separándose.
─Pero he decidido que ya no lo haré. Haré lo que me proponga. No me importa lo que los demás digan de mi. Me trae sin cuidado lo que piensen. Incluso si ya no te gusto, incluso si ya has comenzado a odiarme, estoy aquí para decírtelo.
─¿... Aquí?
Por primera vez, Shinonome abrió su boca.
Volteé a ver a mis alrededores y le dije el nombre de la estación donde me encontraba.
La ciudad donde Shinonome vive.
La estación más cercana a la casa de Shinonome es esta. No sé como llegar a la casa de Shinonome desde aquí. Sin embargo, no tengo intenciones de retroceder ahora.
─Te estaré esperando afuera de la estación. Ven por favor. No importa cuanto te tome. Si tus padres son estrictos esperaré hasta que puedas salir. Si aun así no te dejan, me quedaré hasta que tengas que ir a la escuela mañana.
Ya son las 09:00 de la noche.
Si sus padres son estrictos no le permitirán salir.
─Mis padres... no son tan estrictos, pero...
Al escuchar la palabra "pero" apreté el agarre con el que sujetaba mi celular.
Tengo bien claro que estoy haciendo algo bastante extraño.
Creo que también me sentiría algo confundido si alguien me dice que esta cerca de mi casa en estos momentos, pensaría que se trata de un acosador. Sin embargo, ya se me agotaron las ideas. No me importa si ella piensa que soy asqueroso o si me dice que ahora me odia más. Estoy en este lugar siguiendo mis sentimientos de quedarme al lado de Shinonome tanto como sea posible.
─¿... Podrías darme un tiempo para alistarme?
Eventualmente, escuché salir la voz de Shinonome.
─Si.
─Voy a prepararme... así que creo que podría tomarme unos 20 minutos.
─No hay problema. Te esperaré.
─... Entendido. Nos vemos en un rato.
Cuando la llamada terminó con esas palabras, de repente sentí que mi ansiedad comenzó a aumentar. No pude evitar pensar que la actitud cortante de Shinonome era un indicio para una futura separación.
Me pregunto que debería decirle.
Yo soy el que lastimó a Shinonome.
Esto es lo malo de enamorarse. Pero yo soy el que tiene la culpa.
─Pero...
Murmuré mientras me cruzaba de brazos y bajaba la mirada.
Aun así, no quiero que termine de esta forma.
Recordé las palabras de Keisuke.
No todo se puede explicar con palabras. Eso es lo que dijo él.
Estoy seguro que él no se refería a que explicar las cosas con palabras era algo malo o equivocado, sino que hay otras cosas que son más importantes.
Eso es debido a que las palabras solo son un medio.
Las palabras son solo una forma de expresar nuestros sentimientos hacia los demás.
Y que existen otras formas de lograr lo mismo.
Podría ser por ejemplo, tomarse de la mano, sonreírse o abrazarse. Se podría hacer solo con preparar un curry como hizo Keisuke. Depende de como te sientas.
Al no saber que más hacer, solo me dediqué a esperar.
Esperar por las palabras de Shinonome. Solo sus palabras.
Pero eso es lo que no me termina de gustar. Aquí es donde todo podría terminar.
Estoy seguro que ahora lo puedo hacer mejor. Puedo pensar más en ti que antes. Aunque sea el más mínimo gesto, la más débil expresión o la más insignificante de tus respiraciones, haré mi mejor esfuerzo por entender tus sentimientos.
Incluso si cometo un error no hay porque alarmarse.
Aun no logró comprender lo que piensa Keisuke y eso que somos hermanos de sangre. No es como que pueda decir en lo que estás pensando. Aun hoy cuando logré desentrañar un poco de lo que pasaba por la mente de Keisuke en un capricho, me di cuenta de la mentalidad derrotista que había estado teniendo.
El solo hecho que seamos hermanos no significa que nos podamos entender sin hacer nada.
Más aun, Shinonome y yo somos extraños, así que con más razón debería hacer un esfuerzo por entender los sentimientos de Shinonome y lograr entrar en su espacio personal.
En el momento que nuestros ojos se encuentren.
El momento cuando Shinonome se acerque a mi lado.
Cuando la vea triste y alicaída.
Debería haber sido capaz de entender el corazón y los sentimientos de Shinonome.
Luego de pensar en esto me di cuenta que ya habían transcurrido 10 minutos.
Me percaté que un mosquito se me había prendido del brazo y cuando intenté matarlo me detuve. Si mató al zancudo en este momento todo podría colapsar. Mi mente estaba tan llena de ansiedad que ya me ponía a pensar en esas cosas tan absurdas.
Mientras esperaba el tiempo seguía transcurriendo.
Levanté la mirada cuando escuché el sonido de unas pisadas que se acercaban. No obstante, el dueño de esas pisadas era un empleado de oficina que iba para su casa del trabajo, perdiendo el interés volví a agachar la cabeza decepcionado.
Justo después de eso,
─... Minami-kun.
Escuché la voz de Shinonome acercarse.
Sorprendido, levanté la mirada y vi que el oficinista ya había pasado de largo. Y cuando el hombre desapareció de mi vista, ahí se encontraba Shinonome.
Tragué saliva y me puse de pie.
Shinonome ya estaba parada enfrente de mi.
─Lamento haberte hecho esperar.
Dijo Shinonome.
─... No te preocupes. No esperé mucho.
A mis palabras, Shinonome ladeó un poco la cabeza.
─Ya veo.
─... Nunca te había visto esa ropa.
Lo que Shinonome estaba vistiendo ciertamente era algo que jamás había visto. La falda que estaba usando Shinonome era algo corta y tenía revuelos.
─Quería cambiar mi atuendo para estas vacaciones... así que me la compré.
─¿... Tú sola?
Le pregunté.
El año pasado acompañé a Shinonome a comprar cuando ella quería hacerse de ropa nueva, sin embargo, ella me daba la impresión que nunca había ido a comprar a un almacén. Para alguien como Shinonome que vaya a comprar ropa por su cuenta es algo muy inusual.
─... Iba sola, ¿te acuerdas?
A las palabras de Shinonome casi me atraganto.
Fue cuando la vi con Kitagawa. En aquella oportunidad, me di cuenta que Shinonome a lo lejos cargaba con una bolsa.
─Si me hubieras dicho que querías ir de compras te habría acompañado.
Dije, a lo que Shinonome solo bajó la mirada.
─Si...
─Si hubiera quedado con Shinonome, no habría salido con Kitagawa...
Después de haber dicho tanto, sentí que sonaba a como que estaba culpando a Shinonome, por lo que rápidamente callé mis palabras y sacudí la cabeza.
─No, no es eso lo que quiero decir... Eso ya no importa. No vine hasta aquí para decir eso, yo, bueno...
Shinonome levantó la mirada y se me quedó viendo fijamente. Se veía como que estaba a punto de llorar.
Me pregunto si se debe a que esta triste. O es que esta enfadada. No lo sé. No tengo idea, pero no tengo el tiempo para pensarlo.
─Yo...
Solo fue por un momento, pero pude ver que los labios de Shinonome estaban fuertemente cerrados. Además, las pestañas de Shinonome estaban temblando ligeramente. Se veía aterrada. Parecía como que estaba lista para lo peor.
Me rindo.
Si me pongo a querer adivinar lo que esta pensando no vamos a llegar a ningún lado. Ya sea que le guste o no, en este momento tengo que decirle exactamente como me siento.
Si no lo hago, no podremos seguir adelante.
─Me gustas Shinonome.
Con un sobresalto, el cuerpo de Shinonome se estremeció. Y con cautela, levantó la mirada para verme.
La boca de Shinonome se abrió lentamente y empezó a decir algo.
Abriendo mi boca nuevamente interrumpí lo que ella quería decir.
─Solo me di cuenta. Que nunca te lo había dicho... Cuando Shinonome me preguntó la primera vez si quería salir con ella, yo no estaba seguro... si me gustabas o no. Pero para segunda vez, cuando yo fui el que te pidió que salieras conmigo, ya para ese entonces me había enamorado de ti.
Me enrolle las mangas y respiré profundamente.
Y entonces se lo dije otra vez.
─Me sigues... gustando. Desde ese entonces.
Por un tiempo, Shinonome solo se me quedó viendo sin decir nada. Pude notar que sus ojos se empezaron a poner acuosos.
─¿No te lo dije antes...?
Eventualmente, Shinonome bajó la mirada y abrió la boca.
─Que nunca me he enamorado de alguien.
─Si...
Esto sucedió antes de empezar a salir con Shinonome.
Ella me dijo que quería escribir una novela romántica. Pero que nunca se había enamorado. Esa es la razón por la que me pidió ayuda... ese fue el principio de nuestra pseudo-relación.
─Todo este tiempo me lo he preguntado. ¿Qué es lo que significa que te guste alguien? Tengo la idea que es diferente de cuando uno dice que le gustan los chocolates o los gatos..., pero no puedo definirlo con exactitud. Entonces, ¿cuál es la diferencia?
Shinonome ladeó su cabeza a un lado mientras bajaba la mirada y jugaba con las puntas de su cabello. Ella enrolló su cabello alrededor de sus dedos un par de veces como si no estuviera segura de algo, y entonces siguió hablando.
─Me gusta tu voz Minami-kun. Me sentía tan llena de dicha cada vez que me hablabas. Cuando escuchó tu voz me hace sentir tan tranquila. Una vez me di cuenta de eso, me empecé a sentir más atraída hacia ti, me preguntaba si esto es lo que significaba enamorarse de alguien. Sin embargo... pensé que quizás lo único que me gustaba de ti era tu voz. Pensé que ese probablemente no era el sentimiento de cuando uno se enamora de alguien.
─Yo...
Estaba a punto de decir que no pasaba nada, no obstante, la mano de Shinonome se puso encima de mis labios para evitar que dijera algo.
─Espera... dejame terminar. Todavía hay tantas cosas que no te he dicho.
─L-Lo siento...
Shinonome respiró profundamente. Me miró fijamente. Me sentí tentando a desviar la mirada. Es bastante difícil escucharla mientras se me queda viendo tan fijamente. Quiero abrazarla en este momento.
─Cuando le pedí a Minami-kun que saliéramos, una parte de mi pensaba que quería confirmar este hecho. Tú escuchaste mis deseos y pasamos más tiempo juntos... entre tanto, sentí que gradualmente empecé a entender mis propios sentimientos. Me sentí muy feliz cuando me pediste que saliéramos. Sentí... que era lo mejor que me había pasado.
No pude decir nada todo lo que podía hacer era ver directo a los ojos a Shinonome.
Tenía plena certeza que ella tenía más que decir.
─Bastante tiempo transcurrió desde entonces, pero siempre me sentía un tanto intranquila. No tenía plena certeza de decir si de verdad me había enamorado. En eso, una persona apareció a tu lado Minami-kun.
─... ¿Hablas de Kitagawa?
Ya no podía callarlo más así que mencioné su nombre, a lo que Shinonome asintió.
─No me gusto. No el hecho que Kitagawa-san se te acercara... sino que tú la aceptaste. Cada vez que los veía juntos me dolía el corazón. Cada vez que te veía sentía que comenzaba a odiarte Minami-kun. No podía evitarlo, se trataba de ti...
Cuando terminó de decir eso, Shinonome otra vez bajó la mirada.
Sus labios temblaban ligeramente. Su respiración se veía entrecortada.
Ya lo veía venir.
Yo la he lastimado. Y por esa razón no es de extrañarse que ella me odie o se haya cansado de mi.
Sin embargo, nunca pensé que sería tan doloroso escucharlo de la boca de Shinonome.
Me dije a mi mismo porque no pude ser más considerado con ella, aunque sea solo un poco. Sin embargo, arrepentirse no va a cambiar el pasado.
─... Pero sabes.
Dijo Shinonome.
─He pensado. Creo que jamás he sentido tanto odio por alguien en toda mi vida. Nunca me he sentido tan perturbada por lo que otra persona hace o por lo que dice. Si ese es el caso, entonces porque me siento de esa manera hacia ti Minami-kun, eso es lo que me he puesto a pensar estos días. Lo he estado pensando, pensando y vuelto a pensar... tantas palabras se me acumulaban que antes de darme cuenta ya tenía escrito el guión para la obra.
─¿«Es difícil amar...»?
Cuando le mencioné el título del guión, Shinonome me volteó a ver sonriendo un poco avergonzada.
─Lo sabía, todavía me da vergüenza cuando mencionas el título en voz alta...
─Perdón...
─Pero así es como me siento.
Exclamé con un "¿Eh?" a esas súbitas palabras.
Shinonome me volteó a ver parpadeando una vez y lentamente abrió su boca.
─No puedo evitarlo, te odio... Tanto así has perturbado mi corazón... que yo...
Pude escuchar como Shinonome otra vez volvió a tragar saliva.
El sonido de los carros, las pisadas de las personas y el sonido del tren, todo eso desapareció en ese momento. No podía escucharlo. Pero en ese solitario silencio, la voz de Shinonome fue lo único que llegó claramente a mis oídos.
─Me gustas Minami.
Inmediatamente después de esas palabras, el ruido exterior perforó mis tímpanos, como si el tiempo que se había detenido comenzara a fluir nuevamente. Las palabras "me gustas" que Shinonome acababa de decir resonaron en mis oídos como si fueran el sonido de una campana.
─... -kun.
Agachando la mirada por la vergüenza, Shinonome terminó de decir la frase.
No puede evitar enamorarme de ese gesto.
Quiero abrazar a Shinonome en este momento, fue lo que pensé. Sin embargo, mientras mis pies se movían, mi mente me llevó a recordar el desenlace del guión que escribió Shinonome.
El hombre que no podía hablar le transmitió sus sentimientos a la mujer al ofrecerle la flor y luego la dejó.
Titubeé en acercarme a Shinonome ya que temía que ella podía irse en cualquier momento. Las puntas de mis dedos temblaban ante la idea de que pasaría si ella huye de mi abrazo.
Aun así, di un paso al frente.
Shinonome me miró con una expresión desconcertada.
No me importó, avancé otro paso, como si fuera a morir si no lo hacía y entonces...
─Ah...
Y así, abracé el cuerpo de Shinonome.
─¿Minami-kun...?
Escuché la voz de Shinonome a través de mi oído. Sonaba tanto confundida como un poco espantada.
─Lo siento por todo.
Pude sentir el calor corporal de Shinonome a través de mi cuerpo. Ella contorsionó su cuerpo en un intento de liberarse, sin embargo no la dejé y tampoco aflojé mi agarre.
─Me duele...
─Lo sé... pero tengo miedo de que te vayas.
Y entonces abracé con más fuerza el cuerpo de Shinonome.
─... hum, ¿te refieres a como en el guión?
Con una respiración dolorosa, Shinonome dejó salir unas cuantas palabras.
─Si.
─Si, estaba pensando en hacerlo... Cuando lo estaba escribiendo... Pensé que sería lo mejor...
─¿Por qué...?
─Te odio Minami-kun...
─Pero también me dijiste que te gusto.
─Me gustas pero...
─¿Es porque me odias?
Lentamente me alejé de Shinonome. Sin embargo, aun le sostenía los hombros... ya que tenía miedo a que se fuera... y me le quedé viendo a los ojos.
─...¿Todavía me odias?
Cuando le pregunté eso Shinonome volteó a ver a otro lado,
─... Ya no sé.
Me dijo con un leve tono de voz.
─En estos momentos ya no me siento de la misma manera...
─Me gustas Shinonome. Por eso, es que quiero estar contigo. Solo quedate a mi lado.
─¿Qué debería hacer...?
─Por favor quedate conmigo. No quiero separarme de ti. No importa lo que suceda en el futuro me quedaré a tu lado. Así que quedate conmigo Shinonome.
Shinonome levantó la mirada para verme y se veía que estaba al borde de las lágrimas.
Tiré de sus hombros para que se me acercara.
El rostro de ella estaba a escasos centímetros del mío. Coloqué mi mano sobre su mejilla y me acerqué.
Shinonome debe haberse percatado de mis intenciones ya que puso sus manos sobre mi pecho e intentó empujarme con todas sus fuerzas.
─... Si no quieres solo tienes que decírmelo.
Mientras decía eso, Shinonome apartó la mirada y revisó sus alrededores.
─N-No es que no quiera... es.. es que hay personas...
─Eso es lo de menos. Quiero hacerlo en este momento.
─P-Pero...
─Ya no sé que más decirte puesto que soy un idiota. No hay mejor forma para hacerte saber lo que siento. Si las palabras "me gustas" no son suficientes para dejarte tranquila, no puedo pensar en otro método que este.
Ella quiso agachar la cabeza pero como mi mano estaba sobre su mejilla hice que la volviera a subir. La miré a los ojos y le volví a preguntar.
─¿... No quieres?
─No es que no quiera...
─Me quedaré contigo para siempre.
─¿De verdad...?
─De verdad.
Con esas palabras sellé mis labios con los de Shinonome.
Abrazando a Shinonome con los ojos cerrados, dejé ir sus labios un momento,
─... Me gustas
Y entonces la volví a besar...
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